Si al Señor lo acusaron de estar poseido por un demonio y expulsar los demonios con el poder de Beelzebú, a mí de qué no me acusarán, si solo soy Su fiel esclavo.
0 Comentarios
Celebré mi cumpleaños hace una semana con mi familia.
En el primer restaurante, el mesero tenía una mala disposición y no me molesté en decirle que era mi cumpleaños (aunque ya lo sabía). Simplemente lo ignoré y me la pasé bien con mi familia. En el segundo restaurante, un muchacho (no nuestra mesera) trajo algo a la mesa y yo derramé un poco de mi bebida sin querer. El muchacho se portó muy amable conmigo y me dijo que me traería otra. Yo le dije que no se molestara, que no era necesario porque había tirado solamente un poco. Pero el insistió que quería traerme otra bebida para no sentirse mal. Le dije que estaba bien. Pero al final la mesera nos cobró por las dos bebidas, inclyuendo la bebida que yo no había ordenado, cuando la mayoría de los restaurantes te regalan una bebida el día del tu cumpleaños. En el tercer restaurante, no me regalaron una bebida sino dos, y aparte me regalaron dos postres para celebrar con mi familia mi cumpleaños. Muchas gracias por todo su amor. Que Dios los bendiga siempre por toda su generosidad y multiplique su abundancia. “Señor, hazme casto, pero no todavía”. –San Agustín Si a mí, que sólo soy un pobre pecador, me han juzgado porque veía pornografía para no estar con nadie que no fuera mi amor, ¡qué dirán de los santos!
|
Pensamientos
|