Recuerdo que hace mucho años, cuando apenas era un estudiante en la Universidad de California, Riverside, conocí a la Señora Cristina Saralegui en el aeropuerto de Colorado. Y, cuando ya nos habíamos despedido, le dijo a su marido que un día iba a ser una persona muy grande. Se portó muy dulce y amable conmigo, pero yo nunca he querido ser alguien grande. Todo lo contrario, siempre he querido ser muy pequeño para estar siempre en los brazos de nuestro Señor Jesucristo. ESRI: ¿Quién es esa niña que llevas en Tus brazos?
0 Comentarios
Tu comentario se publicará después de su aprobación.
Deja una respuesta. |
Pensamientos
|