"Antes de formarte en el seno de tu madre, ya te conocía..."
(Jer 1:5)
Virgencita, por favor cuida de todos los niños que son abortados por sus malas madres.
Ellos también necesitan de una madre que los ame y los cuide.
El Pecado del Aborto
Hoy quería mucho poder orar ante el Sagrado Sacramento, pero la voluntad de Dios fue otra. A las ocho, unos dolores
muy violentos se apoderaron de mí y tuve que irme a la cama inmendiatamente. Sufrí convulsiones por tres horas [...]
Ninguna medicina me hacía efecto, y todo lo que tomaba lo vomitaba. En ratos, el dolor me hacía perder la conciencia.
Jesús me hizo entender que en esta manera tomaba parte en Su Agonía en el Jardín, y que Él mismo permitía estos
sufrimientos para ofrecer reparaciones a Dios por las almas asesinadas en los vientres de madres malvadas.
Ahora entiendo la naturaleza de estas penas, porque el mismo Señor me lo ha hecho saber... Sin embargo cuando
pienso que quizás pueda sufrir de este modo otra vez, yo tiemblo. Pero no sé si alguna vez sufriré así de nuevo;
se lo dejo a Dios. Lo que le agrade a Dios mandarme, lo aceptaré con amor y sumisión.
¡Si tan siquiera pudiera salvar un alma del asesinato a través de estos sufrimientos!
Santa Maria Faustina Kowalska
Diario: Divina Misericordia en mi Alma
muy violentos se apoderaron de mí y tuve que irme a la cama inmendiatamente. Sufrí convulsiones por tres horas [...]
Ninguna medicina me hacía efecto, y todo lo que tomaba lo vomitaba. En ratos, el dolor me hacía perder la conciencia.
Jesús me hizo entender que en esta manera tomaba parte en Su Agonía en el Jardín, y que Él mismo permitía estos
sufrimientos para ofrecer reparaciones a Dios por las almas asesinadas en los vientres de madres malvadas.
Ahora entiendo la naturaleza de estas penas, porque el mismo Señor me lo ha hecho saber... Sin embargo cuando
pienso que quizás pueda sufrir de este modo otra vez, yo tiemblo. Pero no sé si alguna vez sufriré así de nuevo;
se lo dejo a Dios. Lo que le agrade a Dios mandarme, lo aceptaré con amor y sumisión.
¡Si tan siquiera pudiera salvar un alma del asesinato a través de estos sufrimientos!
Santa Maria Faustina Kowalska
Diario: Divina Misericordia en mi Alma
Penitencia de una Mujer que Abortó su Bebé
Una vez una mujer se sorprendió cuando [el Santo Padre Pío] le dijo su penitencia.
Usualmente la pena sería decir una oración. Pero, en este caso, por su pecado,
era ir a su casa y mirar dentro del pozo que estaba en su jardín.
Cuando lo hizo, vio la cara del hijo que había abortado hacía muchos años.
Usualmente la pena sería decir una oración. Pero, en este caso, por su pecado,
era ir a su casa y mirar dentro del pozo que estaba en su jardín.
Cuando lo hizo, vio la cara del hijo que había abortado hacía muchos años.
El Milagro de la Vida
Dices que es tu cuerpo, y tienes el derecho...
Pero recuerda que no es tu vida la que termina.
No le niegues la oportunidad de vivir.
Él también tiene derecho a ser feliz.
Pero recuerda que no es tu vida la que termina.
No le niegues la oportunidad de vivir.
Él también tiene derecho a ser feliz.